Fuente:La vanguardia |
Barcelona. (ACN).- La escuela inclusiva debería
garantizar la presencia, el aprendizaje y la participación de los niños y niñas
que tienen algún tipo de dificultad. El autismo es una y en Catalunya
sólo el 34% de los niños diagnosticados están escolarizados en centros
ordinarios. El programa Construim
capacitats de la asociación Aprenem, ha permitido que hasta 44 niños y
niñas reciban ayuda a los centros ordinarios con personal externo. Los
resultados demuestran que mejoran las capacidades comunicativas y sociales.
Asimismo, sus compañeros, crecen con más valores y asumiendo las diferencias
como normalidad. Por ello, Aprenem alargará el programa y reclama un compromiso
para que el sistema público garantice esta atención especial.
Biel tiene 3 años y cursa P3. Por la mañana, su abuela
le lleva hasta la clase, donde se encuentra con la maestra y los otros 19
compañeros del grupo, así como también con una psicóloga que la acompaña la
mayor parte del tiempo en que Biel está el escuela. Y es que Biel fue
diagnosticado con el Trastorno del Espectro Autista (TEA) y por su complejidad,
necesita algunos soportes especiales. Sin embargo, está escolarizado en La
Salle Comtal de Barcelona, una escuela ordinaria, porque sus padres apostaron
firmemente por el que se llama la escuela inclusiva.